Tres de cada diez centros de salud de nuestro país sufren problemas de calidad en el aire que respiran sus profesionales y pacientes, al superarse en determinadas estancias el máximo recomendado de concentración de dióxido de carbono (CO2).
Tres de cada diez centros de salud de nuestro país sufren problemas de calidad en el aire que respiran sus profesionales y pacientes, al superarse en determinadas estancias el máximo recomendado de concentración de dióxido de carbono (CO2).